sábado, 26 de julio de 2014

viernes, 25 de julio de 2014

Terriblemente cruel

A veces esperas respuestas que son milagros. A veces esperas milagros. A veces no esperas nada. La manera que has elegido de permanecer sin estar es tan válida como débil. Es un arma de doble filo, es una hoguera de la que quedan las brasas.
Todo está bien hasta que deja de estarlo, y todo está mal hasta que te decides. Importan los tiempos, importan las palabras, importan los silencios, importan las esperas. Todo suma y todo resta en un juego en el que no hay reglas. En el que las listas nunca llegan. En el que los libros tampoco. (Porque vivir es jugar y yo quiero seguir jugando.)
Ten cuidado o llegaremos tarde.

lunes, 14 de julio de 2014

De haberlo sabido

Una escalera endeble que llega a un infierno al que nos da miedo asomarnos. Ventanillas de coche que bajan de manera misteriosa, canciones que ya son recuerdos, las olas ausentes más grandes del mundo. El mar. Volver a compartir palabras, música, almohada y ascensor. Manos llenas de espuma, bocas llenas de besos, cuerpos llenos de ganas. Quizás, quizás, quizás no estoy perdiendo el tiempo.
Tés que fueron medicinas, el olor de esa vela en el salón, susurros sobre nada en la cocina. Camisetas que no cumplen su misión, edredones que taparon risas, cosquillas secretas que me arrepiento de no haber buscado.
A esto me refería con ese trozo de canción.