Pasear de noche por sitios públicos que se vuelven privados en el silencio. Con más cervezas que sentido común en la cabeza, con alguna intención aún sin identificar. Algunos pensamientos de esos que no te atreves a decir en voz alta porque sería reconocerlos, algunos miedos. Siete días.
Ocho.
No hay comentarios:
Publicar un comentario